lunes, 19 de diciembre de 2016

Vibrando en sintonía

Cada vez soy más consciente de que las almas no tienen edad...

Hace unos días estando con mi sobrino de seis años me quedé perpleja...

Como puede ser que una personita de la que me separan 50 años pueda vibrar en la misma sintonía que yo....

Como es posible que alguien tan pequeño tenga gustos tan de "mayor"... y es que él tenía muchas opciones de villancicos  para elegir, se había visto muchos vídeos de YouTube, cosa que me deja impresionada, claro que es de la generación 100% digital... -ya cuando no levantaba un palmo y no sabía ni leer, pasaba con el dedito las pantallas de la tablet a la velocidad del rayo.-
Bueno pues de todo lo que llegó a sus diminutos oídos le atrajo, como si de un imán se tratara, la sintonía más tribal, la que nos devuelve a los orígenes...

Él me la mostró fascinado y yo me quedé fascinada con ambos, escuchar como la cantaba, con ese sentimiento, notando que los bongos y los tambores se adentraban en él, que no se fijó en razas, sexos, edades o colores, se centró nada más que en lo que esas notas, imágenes y sonidos le transmitían, que de las miles de versiones eligiera una con esa fuerza... sinceramente me conmovió.

Y es que el vibrar en la misma sintonía no tiene edad, uno siente con el corazón pero percibe con el alma y esa, esa esta hecha de trocitos de cielo de otras muchas almas , es atemporal, cálida,y pura.



El "para pa pa...paaa" resuena en mis oídos desde entonces, llenándome de ese espíritu de la navidad sin parafernalias, ese espíritu de ayuda mutua, ese que nos lleva a apoyar al otro y hacer que disfrute de las fiestas lo mejor posible, que nos induce a aportar lo poco o mucho que podamos sin medirlo, ni pregonarlo, unidos en  comunión con los que no lo están pasando bien o con aquellos que de alguna manera nos necesitan, no hace falta irse lejos, puede ser nuestro vecino, nuestro compañero de trabajo, nuestro hermano...o incluso nosotros mismos, que en ocasiones también necesitamos de nuestra propia atención y sonrisa...


En nuestra mano está que los que nos rodean perciban nuestro calor,  reciban nuestra sonrisa y puedan sentir esperanza y fuerza para seguir adelante, recordando que en cualquier lugar está la estrella que conduce a la luz.

Os deseo te todo corazón  que siempre haya una estrella en vuestras vidas y que viváis estos días siendo conscientes de lo afortunados que somos por poco que tengamos.
Ese es, para mi, el auténtico espíritu de la Navidad, ese renacer dejando atrás lo que nos daña, con ilusión, y ese AMOR con mayúsculas que se perpetúan en el tiempo y no acaban con la llegada de los Reyes Magos.


 Se me van los pies y me embarga la emoción, ¿no os pasa a vosotros lo mismo?




lunes, 5 de diciembre de 2016

La rutina de amar

A veces bien bien alejarse de las personas que amamos para darnos cuenta de lo importante que es que estén a nuestro lado...

Es increíble cómo aquello que se convierte en cotidiano pasa, con velocidad de vértigo, a perder su magia, o al menos, a disminuir el brillo.

Me niego a que suceda esto, yo soy la primera que a veces olvido lo importante que es tener al lado a las personas que amamos, poder escuchar sus palabras, comentar las cosas más triviales, reír e incluso discutir las diferencias. 

La presencia de esas personas es mágica...
A su lado nos sentimos más felices, más tranquilos,  más completos y más plenos. 
Es curioso cómo suspiramos por su contacto y cuando estamos juntos lo sentimos tan natural que nos olvida dotarlo de ese sentido fiestero que debiera tener, y dejamos de seguir suspirando...

Pienso que hay mucho de "posesión" en esa actitud...

No siempre es fácil compartir presencia,  las distancias físicas, nos dificultan esas expresiones de afecto, el beso, el achuchón, el abrazo, el guiño, la sonrisa cómplice e incluso el silencio pacificador. 

Es curioso pero una vez que tenemos lo que anhelamos ya no suspiramos por ello...
Se torna automáticamente en "mío", en "mi propiedad", "mi", "mi", "mi"... eso lo hacemos con todo aquello que es material,  pero igualmente convertimos  a las personas en objetos de deseo, y no nos damos cuenta de que nadie puede ser dueño de nadie, que solo nos pertenece nuestro propio ser, y también "jugamos" con ello, los sentimientos no se pueden poseer, yo no soy dueña de tu cariño, de tu risa, de tu complicidad, de tu amistad, de tus conocimientos, de tu entrega, de tu amor, por mucho que me empeñe y lo desee, esos son un gran un regalo, un "no va más" en la ruleta de la vida... 
Olvidamos que no se suspira tan solo de pena, se suspira igualmente de satisfacción, de orgullo, de bienestar, de alivio, de tranquilidad. 
Dejamos de disfrutar de esos suspiros y de su procedencia como si el sentido de los deseos se perdiera una vez alcanzados... que despropósito...

Lo mismo pasa con las personas que admiramos sea por el motivo que sea, una vez incorporados a nuestra vida cotidiana  les restamos valor, algo injusto y equivocado. 

Me niego a convertir a aquellos que amo en la rutina de mi vida, quiero vibrar con su presencia tanto como con su ausencia, quiero  no olvidarme de ser agradecida. 

Tu ausencia me lleva a pensar que tu presencia es todo un regalo, algo que no quiero olvidar nunca... 

Contigo, si, contigo que lees esto, me nutro, aprendo, crezco y me reinvento... mil gracias siempre por ello. 



lunes, 21 de noviembre de 2016

Disfrutar o atesorar... (con Mary Poppins)

Cuantas veces atesoramos cosas y dinero y nos olvidamos de disfrutarlas...

Nunca me cansaré de ver la película Mary Poppins, es de esas que siempre tienen algo que enseñarte. Me gusta fijar mi atención cada vez en cosas distintas ,y he de decir que me parece que está llena de pequeños detalles con significado.

Hoy zapeando he llegado a ella, ya estaba empezada, más bien casi terminando, justo en la escena de los dos peniques que padre e hijos llevaban al banco, ¿os acordáis?

Me ha llamado poderosamente la atención la cara de sorpresa de los hijos ante la reacción de su padre, cuando en lugar de dejarles utilizar sus dos peniques para comprar comida para las palomas, algo que iba a llenar su corazón, y que para ellos tenía todo el sentido,  les induce a guardarlo en el banco con el fin de atesorar para el futuro, y no digo que haya que derrochar, ni dejar de enseñarles a los niños el valor del dinero que se consigue luchando, digo que todo en su justa medida... los extremismos nunca son buenos...


Expresiones de incredulidad y tristeza. Y es que los hijos necesitan pequeños gestos de amor que les ayuden a conectar su mundo con el de los adultos.

Pensándolo bien,  en muchas ocasiones dotamos de mayor importancia a lo material que a aquello que puede producir una satisfacción emocional, pensamos que el bienestar nos lo produce el poseer, y lo triste es que cuando queremos darnos cuenta de que nos hemos equivocado ya ha pasado lo bonito de ese momento, ya no podemos rebobinar, momento que se va, ya no vuelve.



Que poco edificante es centrarse principalmente  en lo material, las reacciones de las personas que están enfocadas ahí están desprovistas de emociones, es obvio, como se va a estar si se permanece constantemente "...encerrado con montones de dinero frío y triste...", dice Bert, refiriéndose a los banqueros... que frase más inteligente!  aplicable por otra parte a muchos profesionales en distintos campos.

Conversaciones llenas de contenido, de un adulto amigo a unos niños desorientados...

Un padre que vive una situación así siempre necesita que le ayuden un poco...les dice el deshollinador, y estoy de acuerdo, la mayoría de las personas que permanecen más inmersas en ese mundo de materialidad necesitan más apoyo aunque no lo sepan ver, ni lo aparenten, por qué en su fuero interno se sienten muy solos. 

Qué equivocados estamos cuando pensamos que las cosas materiales nos darán la felicidad, nos pueden ofrecer momentos de disfrute, eso es innegable,  pero la felicidad es un estado de bienestar interno, de paz con uno mismo y con el entorno, de aceptación con alegría no con resignación, que no depende de tener sino de ser, no va de cómo estamos sino de cómo nos sentimos ...   


Regalar y acumular momentos, es mucho más gratificante que atesorar peniques, y si la vida nos da píldoras amargas, ya sabéis  con un poco de azúcar, y de magia, se tragan mejor... 







domingo, 6 de noviembre de 2016

Entre vides anda...el juego

Si, hoy necesitaba respirar, perderme en la madre naturaleza y llenarme de oxígeno.

He cogido el coche sin rumbo, en busca de los colores del otoño, del baile de sus hojas al caer, del olor de la tierra, del chasquido al caminar.

Me he detenido entre vides..., necesitaba soltar enojo, rabia acumulada, hablarme en voz alta, incluso gritar.

En ocasiones uno siente impotencia...


El paisaje no podía ser más hermoso, he pensado que la naturaleza desharía mi enojo.

Y así ha sido...

Uno no puede contemplar sin dejar de estar enfadado... se necesitan los cinco sentidos para percibir, sentir, y emocionarse, ¿como no hacerlo ante tanta belleza?

Paseando entre las vides, acompañada por el silencio y el olor a uvas pasas, me he dado cuenta de que solamente nos perturba aquello a lo que le permitimos llegar a los mas profundo de nuestro interior.
Allí se esconden granos que van acumulándose formando racimos de encono, de rencor, de envidia, de ira, que lejos de ser dulces como las uvas lo único que nos aportan es amargura. Hay que encontrarlos y recogerlos, transformándolos en  aprendizaje, aceptación, reflexión... 
 
Que no podemos permitir que nada ni nadie maneje nuestra felicidad, ensombrezca nuestros logros,  nos impida disfrutar de momentos dulces.

Soy afortunada, reconozco mis miedos y los combato.


Allí, entre las parras, no sentía sino emoción por la grandeza de lo que se abría ante mi. Mis ojos iban del verde al rojo, y al morado, y al granate, y otra vez al rojo y al amarillo y al naranja, a cual más hermoso, y yo, como siempre que contemplo la naturaleza, extasiada!

Un paisaje cambiante, dependiendo de la estación que vive, pero, aún cuando pierde sus hojas , y queda la cepa al desnudo, lleno de luz, y  de vida. 

Lo que sentimos ante lo que acontece lo decidimos nosotros, con nuestras reacciones, y nuestros pensamientos.

La vida como el paisaje de las viñas, tiene colores increíbles,  algunos teñidos de dolor, de contrariedades, de injusticias, es verdad, como también lo es que si observamos el conjunto de lo que vivimos la imagen es maravillosa, no podemos quedarnos sólo con aquello que no nos gusta.




Os propongo un juego: fijar la atención en aquello de positivo y bello que nos rodea, es mucho y muy variado, escribidlo cada día, cuando vemos las cosas escritas  tomamos más consciencia,  y después agradecer a la vida por ello.
Os aseguro que da resultado, probadlo!

No se puede perder tiempo, esta vida es una y pasa... y se seca...








sábado, 22 de octubre de 2016

He tendido un puente...


Está mañana he tendido un puente, largo, muy largo...

Un puente lo suficientemente largo  para que llegue allá donde estés, el cielo, las profundidades de la tierra, el universo o la nada.

Un puente que me permita, cuando lo desee, cuando lo necesite, acercarme hasta ti,  estrechar tus manos, ahora imaginarias, y conversar y discutir como tantas tardes y de tantos temas que tu mente sabia planteaba..

Un puente para alcanzar el brillo de tus ojos,  tu mirada, tu sonrisa,  para llegar hasta la gallardía y la impotencia de última hora.

Un puente para que puedas acariciarme como nunca lo has hecho quizás  por timidez, no por falta de amor, de esa manera achuchona que a mi me gusta, para que volvamos a los juegos de niñez, para que me reprendas con esa flema británica tan tuya...

He tendido un puente para agradecerte, para sonreirte, para recordarte, para no perderte.

Un puente ya que no podría ser de otra forma, tenemos que permanecer unidos, yo soy tu y tú eres yo, y por ello algo de mi se ha ido contigo.

He tendido un puente para encontrarme, para aceptar, para comprender y para seguir viviendo.



sábado, 30 de julio de 2016

Olivia y su rosa

 Olivia, mi teckel, mi compi, mi amiga perruna, murió hace casi 3 meses,  planté un rosal en su honor, enterrando su collar y queriendo atrapar su energía.

Hoy me ha regalado su primera flor, pequeña pero delicada.


Mi amiga, Marlene, me lo regaló amarillo ya que Olivia era alegre, fuerte, y decidida, pero, a tenor de lo que su energía ha empujado a nacer, ella prefiere que la recordemos cómo:

 Tierna...



Tímida...



Y sobre todo hermosa, muy hermosa 



A veces, lo que recordamos de alguien no corresponde a la realidad,  incluso la imagen que proyectamos de nosotros mismos, no es lo que de verdad somos. 

Permitámonos emerger como somos.



viernes, 6 de mayo de 2016

Y Olivia se durmió para siempre...

En ocasiones cuando te encuentras triste, donde no hay una persona, hay un animal que te brinda su pata...

Estoy segura que al leer esta entrada habrá a quien le cueste entender lo que se siente por los animales... y es que, el amor perruno es difícil de creer si no se vive o se ha vivido.
 Y digo amor perruno mutuo, ya que yo la quise, pero, ella a mí también me lo demostró a lo largo de estos casi once años de vida de muy diversas maneras.



En los momentos duros, los lametones, los arrumacos, los juegos, todo eso ayuda a salir adelante, es imposible no sonreír cuando los ves hacer el payaso de esa manera tan graciosa, y revolverse en la alfombra de gusto, como si esa alfombra, ya ajada, fuera lo más maravilloso del mundo, y es que para ellos lo es, tienen todo lo necesario, un hogar, donde dormir comer y vivir, y una familia que los quiere, cuantas lecciones a aprender.

Olivia , landronzuela pícara se comió un calcetín, adoraba mi olor, a veces se ponía en la cama  como si quisiera protejerme de cualquier daño, me miraba con esos ojos tan expresivo vigilante, y le gustaba sentirme cerca, no era pegajosa, ni protestona, era independiente, pero cercana.
La mayor de tres, organizaba el espacio y dejaba que las pequeñas se acercaran más, las consentía, permitía hasta que probaran su comida, paciente, protectora, su misión era cuidar de nosotras.



Ese calcetín, le dañó el estómago, intentó devolverlo, lo estiró tanto que incluso parecía más una media larga,  pero... no hubo nada que hacer y tuvieron que operarla,  recién operada, recuerdo como se levantó  de su "casita jaula", en el veterinario, para verme, y como lloraba al saber que la dejaba allí, y no volvía con nosotras...
no se, pienso que tal vez se sintió engañada, yo le decía que se recuperaría pronto, e incluso la llevé a casa,  y pese a que salió bien la operación, todo se complicó, y empezó a sentirse muy cansada, lo intentaba, claro que lo intentaba, hacía esfuerzo por comer, por agradecer moviendo su colita, pero, lamentablemente, se acercaba el momento de separarnos.


Esta semana ha sido dura, a la tristeza de que un compañero animal, al que quieres, ya que en verdad es un miembro más de la familia,  se encuentre mal, se une el esfuerzo económico que todo tratamiento requiere, es una sensación de impotencia tremenda, de sentirse egoísta, cuestionarse que hay que hacer es muy fuerte...

Todo el mundo dice "es un animal, no saquemos las cosas de quicio", y tienen razón, pero todo lo que yo la debo y la quiero sólo lo sé yo...
Pocas horas antes de partir, con una anemia increíble, sin fuerzas para nada, aún levantaba la cabecita para saludarme, y demostrarme su amor, con esa imagen me quedo, la de luchadora, lo intentó, tenía ganas pero no fuerzas, y...

Olivia me lo puso fácil, se fue sin tener que hacerme decidir, se quedo dormida, con la tranquilidad de haber sido una buena perra,  y yo, también estoy tranquila, hemos disfrutado juntas y nos hemos regalado lo mejor de cada una.

Es duro separarse, da mucha pena, pero más duro es no haber tenido nunca la oportunidad de disfrutar de ese cariño y esa entrega incondicional.

En nombre de Olivia que esté donde esté, estoy segura de que lo aprobaría, quiero dar las gracias a las veterinarias de "Gous Gorraiz" que la han mimado como si fuera suya, Guauuu Guau (gracias chicas) y un rabazo de los suyos de esos que suenan a pasión por la vida.



Ojalá todos muriéramos así de tranquilos y en paz...

lunes, 2 de mayo de 2016

Paseando...


No hay mejor amigo que uno mismo...

Paseando me he dado cuenta de que nunca estoy sola, siempre voy con la mejor compañera, se llama Yola, Yolanda!, Yolandita....dependiendo de lo que me diga, y de cómo me tome lo que me dice....

 La acepto, la respeto, la justifico...

A veces desearía no escucharla, pero agradezco sus reflexiones, sus dudas, sus equivocaciones, aprendo y crezco...

Me engaña... Pues si a veces...
Pero me quiere y yo la quiero!

miércoles, 13 de abril de 2016

A besarse toca!

Un beso lleno de calor sana!

Mira que no soy muy pro del día de nada, me parece que todos los días deben de ser días de todo...

Parece un lío o una perogrullada lo que estoy diciendo, pero creo que las enfermedades, la paz, la mujer (que no debería de tener ninguno especial), el medio ambiente, la amistad, las madres, los padres, el amor... Y tantos otros, son cosas de todos los días.
Que sí, que ya sé que los defensores de esas fechas me vais a decir que viene bien recordarlo, es un pequeño homenaje diario, y lo compro, somos tan débiles de memoria que se nos llegan a olvidar cosas que deberían estar presentes en nuestro caminar cotidiano sí o si...
Un poco triste nuestra falta de atención a lo importante ¿no?, claro hay otras cosas que nunca se nos pasan... 
No sé si hemos cambiado nuestra escala de valores  o estamos tan habituados a dejar de lado aquello que nos cuesta demostrar, nos incomoda, de una u otra manera,  que necesitamos esas dosis de recuerdo...

A lo que iba, que hoy es el día del beso, que me gusta besar y que me besen, que hay besos que te recuerdan que estás vivo, que hoy he disfrutado viendo y leyendo, en las redes,las imágenes y los slogans, que diferentes personas, instituciones, u organizaciones, han puesto, me han parecido llenos de sentido, por eso los he traído aquí, están cargados de buenos deseos, de recordatorios que no deberían de olvidársenos nunca.







  






 

(Fuente: twitter, si alguien no quiere aparecer por favor que me lo indique. Gracias!)

Si es beneficioso, muy beneficioso y ¿cuánto y cómo y cuándo besamos los españoles? En este artículo de Cuatro nos lo explican
http://www.cuatro.com/noticias/cultura/Dia_Internacional_del_Beso-besos_espanoles_0_2163000052.html
pero mirad que nos dicen de cuales son los mejores y los peores besos...


 Curioso, lo que para unos es lo mejor para otros lo peor, y es que por eso hay labios para todos...



Los besos son voluntarios, jamás por la fuerza, si son dados con amor, amistad,  respeto, afecto, son un chute de energía positiva de esa que te abre la sonrisa y te ayuda a seguir con ilusión. 
Parece mentira que algo tan sencillo , como un beso, encierre tanto!

No los escatimes, besa a las personas que amas, no te avergüences, besar es sanísimo y necesario, ah y consume calorías !!!








viernes, 8 de abril de 2016

Siempre vigilantes de esos niños...ya grandes


No importa la edad que tengan, los hijos, para cada padre, nunca dejan de ser niños...

Estaba el otro día paseando y me fijé, reconozco que con envidia,  en unos niños que jugaban alegremente, mientras sus padres, a una prudente distancia, les observaban con atención, vigilando sus movimientos, pendientes de que nada pudiera dañarles.

No pude evitar pensar que poco cambia esa circunstancia a través de los años, aunque si bien  es cierto que cuando nuestros hijos son pequeños nosotros actuamos y controlamos (salvo cosas de fuerza mayor), pero cuando crecen eso escapa de nuestras manos.
He de reconocer que a pesar de que mis hijos son ya dos hombres, continuo vigilante, y sigo, ilusamente, como cuando eran pequeños, intentando que nada les cause dolor.
El mero hecho de pensar, aún cuando sólo sean eso pensamientos, que algo pueda perturbarles ya me afecta, a mi, casi más que a ellos...(será que tengo menos fuerzas, o que miro más allá de lo aparente...)

Y es que si difícil es ponerse en el papel de los demás, en el de nuestros hijos resulta casi imposible.
Presuponemos, nos adelantamos, nos alteramos por cosas que para nosotros serían decisivas, y sin embargo para ellos, que lo  viven desde otra perspectiva, la de la juventud, otra época, distinta generación, son irrelevantes.
Cuantas veces se da la circunstancia de que estamos nosotros preocupados por cosas que para ellos carecen de importancia, o de que  ellos pretendan protegernos de ese malestar, tratando de hacernos ver que todo marcha bien... y nosotros escudriñando la mirada, los mensajes, los gestos... que difícil es "engañar" a un padre, hay un sexto sentido que te dice que algo pasa, y ese, aunque tu también disimules, suele estar en lo cierto.

Todos hemos sido hijos, todos hemos vividos situaciones, aunque acordes con los tiempos, parecidas a las que les suceden a los chicos de hoy, y las hemos afrontado con valentía, relativizándolas y siendo conscientes de las posibles alternativas, sin dramatismos, incluso solemos quitar importancia a lo que afecta a los vástagos de los demás, buscando soluciones positivas, mirando la situación más friamente, con más objetividad, pero, cuando se trata de los nuestros...

Que cierto el refrán " consejos doy que para mi no tengo"... Ay, cuando se trata de los nuestros, un pequeño problema, que altere su armonía, ya desequilibra la nuestra...
Y es que no nos damos cuenta, de que nuestros hijos, como los de los demás, dejan de ser niños para ser adultos, y adultos responsables de sus vidas, olvidamos que ya no podemos solucionar sus inquietudes, ni tomar decisiones por ellos, ni curarles sus heridas con un "cura sana", ni hacer que cesen sus lágrimas con un beso...

Y es que todos queremos que sean felices, pero esa felicidad no podemos encontrarla por ellos, hay un interruptor en nuestro interior que nos permite con un simple click cambiar a modo "predisposición para la felicidad", pero cada uno tiene que activar el suyo, y encontrar ese recobeco en el que está escondido, tarea costosa...y, por mucho que nos cueste a los padres, individual...

Ya no podemos evitarles los avatares de su camino, nuestra misión es enseñarles lo que a nosotros, a cada padre, y lo digo usando el neutro que me permite nuestra lengua, la suya, nos parece la mejor manera de enfrentarlos y afrontarlos, para orientarles, no queriendo que lo resuelvan como nosotros lo haríamos, sino aceptando que ellos adoptarán la suya propia y que nosotros estaremos a su lado, no para recriminar, sino para acompañar.

Todo padre,  lo hace lo mejor que sabe, y puede, si, también  lo mejor que quiere, pero esa idea de "no querer" me resulta dolorosa, y voy a dejar de lado a aquellos que no se hacen cargo de sus hijos, no merecen, a mi modo de entender, el calificativo de padres o madres, con progenitores ya tienen suficiente.

Los hijos, para cada cual los suyos,  nunca dejarán de ser niños, pequeños  o grandes, nunca cesarán nuestras ganas de arroparlos, consolarlos, protegerlos, aunque muchas veces ellos no lo entiendan, y les resultemos cansinos ...
Y a pesar de que llega un momento en el que nos parezca, que no nos necesitan , no es cierto, el simple hecho de que sepan que estamos ahí, queriéndolos, sonriendo y preocupándonos sin que se note,  ya es importante, no están solos y lo saben.

Dicen que el amor entre padres e hijos es decreciente, pero yo no estoy de acuerdo, no es que se quiera más o menos, es que se quiere diferente, cuando eres hijo quieres como hijo y cuando eres padre como padre.

El amor, se respira, se inhala y se exhala, se transmite, se palpa, se siente,  no se mide por cantidad de tiempo se mide por calidad del mismo, siembra que algo queda decían nuestros abuelos, y así es, si sembramos amor, que engloba todo ese cariño, atención, y preocupación, nuestros hijos lo cosecharán y sembrarán en su momento.

Y es que ese milagro que hemos hecho realidad, por mucho que madure nunca dejará de ser, para nosotros, padre y madre, un fruto tierno...

Aún escucho sus carcajadas de pequeños, y me emocionan sus risas de adultos, ya que me gustaría haberles transmitido que esa alegría, pese a los sinsabores, no hay que perderla nunca. 

Y nosotros padres, siempre, aunque sea de corazón y pensamiento, e incluso de alma, permaneceremos vigilantes de esos niños...ya grandes.


jueves, 31 de marzo de 2016

No tomarás mi imagen en vano...

Nadie debería de estar en boca de los demás salvo por méritos propios

 Me pongo a escribir este post una vez transcurridas un par de semanas  de lo acontecido, y lo hago así a conciencia, cuando todo puede parecer  más una anécdota, y ya he recobrado la calma y la indignación ha cedido.

Que diríais si os vais a disfrutar de dos días de relax y nada más llegar, cuando te has hecho el propósito de desconexión de redes y correos, recibes un mensaje de un amigo con una simple pregunta:

"hola, has visto esto?" y el link a una noticia de elplural.com.
Miré, más por curiosidad que otra cosa, y porque ese amigo no me manda  nada que no sea digno de reseñar, al fin y al cabo una tiene ese gusanillo de la información.

Mi sorpresa fue mayúscula, no tuve que buscar en el interior de ninguna noticia, allí en portada, allí estaba yo, mi foto en primera plana


¿Familiares de Urdangarin?... como no fuera porque mi apellido acaba en "in", no le veo explicación, bromas aparte, no tiene, o yo así lo sentí, ninguna gracia.

Leída la noticia, en el cuerpo, se hacía referencia a dos tuits que yo había uno publicado y otro citado, hablando de que la sobrina de Urdangarín arremetía contra Manos Limpias y retuiteaba informaciones contra la abogada...

El primer tuit que yo puse, iba directamente relacionado con la comunicación no verbal, con la cantidad de gestos con las manos de la abogada, solidarizándome con su nerviosismo al interrogar a la infanta:


mi intención no era otra que hacer notar que los gestos comunican, Vanitatis lo utilizó para colocarlo de ejemplo de aquellos tuits que la sobrina de Urdangarin, Carlota Gui, retuiteaba, pero en ningún momento utilizó mi imagen para poner cara a esa sobrina, Twitter es abierto y yo soy responsable de lo que digo, y no me importa que se utilice, pero por supuesto bien utilizado...sin manipulaciones

http://www.vanitatis.elconfidencial.com/casas-reales/2016-03-09/los-dardos-de-carlota-gui-sobrina-de-urdangarin-a-la-abogada-de-manos-limpias_1165385/

El Plural también hacía referencia a otro tuit, que ahora me explico, este tuit me lo enviaron con copia, hoy deduzco que tal vez me confundieran... en cualquier caso yo solamente lo cité, ya que sea Manos Limpias, o sea quien sea,  no me parece correcto:

Este fue el tuit que puso El Plural en su muro:


¿Cómo os quedáis?, pues yo me quedé "muerta", ¿como se podía utilizar mi imagen de esa manera?, ¿quien eran ellos para permitirse poner una noticia sin contrastar la información?
por supuesto empezaron a llegar mensajes de gente que me preguntaba si yo era familia de ese señor, si estaba de acuerdo con lo que había hecho, etc, etc, incluso una persona cercana a Casa Real, mandó un mensaje a una de mis hermanas preguntando que hacía yo ahí....

Y eso también me preguntaba yo, que hacía ahí...

Después de unos momentos de desconcierto, el dedicarme al protocolo me sirvió de mucho, estamos tan habituados a momentos de crisis..., pensé que no me podía dejar llevar por los nervios, así no resolvía nada, me puse en contacto con el periódico a través de Twitter, fue la manera más rápida que se me ocurrió:

Me contestaron pronto, y yo, ingenua de mi, pensé que en efecto estaba subsanado el "error"...
pero no era cierto, mi foto seguía ahí, nadie había modificado nada, salvo borrar el tuit, soy educada, y eso les salva, e insistí


con esa chulería me contestaron, lástima que la información hoy es inmediata pero también fácilmente destruible, no os puedo poner el link a la noticia original pero supongo que ya os haréis una idea viendo sus titulares, pero el hecho cierto es que después de todo mi cara seguía apareciendo y así se lo hice notar:


Su contestación llegó tres cuartos de hora más tarde y cargada de falsedad, como podéis ver en las horas de los tuits, no se rectificó hasta que insistí y mis compañeros protocolistas se lo hicieron notar, mandando tuits pidiendo la supresión de mi imagen.
y aquí terminó, ni un tuit de rectificación, ni mensaje de disculpa veraz, ni nada que se le parezca...

Dos horas no son mucho tiempo, aparentemente, pero para la era digital en la que nos movemos hoy, es un mundo, la información se cuela en muchos sitios y yo no tengo por qué estar en boca de nadie.

Yo soy periodista, pero debe de ser que en mis años de facultad no se enseñaba lo mismo, o que el director y/o redactores de ese medio no fueron a clase esos días, ya que a mi me repitieron hasta la saciedad que no se puede, ni debe, manipular la información, que no todo vale para vender más y mejor, que hay que mantener una ética profesional, que los lectores son sagrados y no se les puede engañar.

Por otra parte, ¿quienes son ellos para utilizar mi imagen así, sin razón alguna?, ¿han pensado que repercusiones tiene para mi persona?, además independientemente de que yo esté o no  de acuerdo con las prácticas atribuidas, supuestamente, al Sr. Urdangarin, que no lo estoy en absoluto, atribuyéndome esa información han mentido, men-ti-do, y eso es intolerable.

Me han faltado al respeto, a mi , a sus lectores, a la profesión y al medio...y eso desgraciadamente es práctica habitual en muchos  ámbitos...

No tiene ningún derecho por eso lo pregono a los cuatro vientos y ya veremos a ver...

Ese periódico para mi ha perdido toda credibilidad, no informa, desinforma muy triste calificativo para un medio público de  comunicación...

No, señores, no, con mi nombre, ni mi imagen no se juega...