martes, 24 de febrero de 2015

Arte, libros, música, y otros buenos alimentos...

Lo que percibimos está siempre a merced de los "ojos" del observador, y nos alimenta en función de lo que estemos dispuestos o preparados para absorber.

Me declaro envidiosa de la creatividad de muchos, me alimenta, me llena, y me colma de placer,  contemplar, escuchar, y leer, letra a letra, cuando ponen el corazón en aquello que crean, por ello también me declaro agradecida.

Hoy me he sentido totalmente cautivada por un cuadro, no sabia quien era su autor o autora, ni siquiera conocía  si era considerado una obra de arte o el sueño de un principiante, simplemente he sentido que esa obra me transmitía algo, más bien, que me transmitía mucho...




Sería capaz de escribir casi un manual entero de todas las lecturas que puedo sacar, como: fuerza y tristeza en la mujer, apoyo y resignación en el hombre.... seguramente ninguna o prácticamente ninguna coincidirán con lo que su autora Montserrat Gudiol http://t.co/LsyECm4Za5 sintió al pintarlo, pero yo si que intuí que había puesto mucho de ella en cada pincelada.
Lo recibí como un alimento para mi alma, con un punto, melancólico, que me ayudo a darme cuenta de que todos vivimos momentos difíciles, situaciones que nos hacen sentirnos apagados, sin vida, pero que la pasión que fluye a nuestro alrededor, la pasión por la vida,  nos ayuda a seguir adelante, y nos recuerda que todo es pasajero, y las malas rachas también.
Es ese rojo que nos envuelve, recordándonos que somos AMOR.

Lo mismo me pasa con la lectura, hay libros que me lo dicen todo y otros que me aportan poco, no porque no lo merezcan, estén mal escritos o su temática no sea interesante, simplemente no llegan a mi inundándolo todo y provocando esa sarta de emociones que te convulsan por dentro y que te hacen crecer.
Pero hoy puedo decir que acabo de terminar un libro que resultó ser un gran festín.

"La Biografía del Silencio" de Pablo D'Ors.

Resumirlo sería pretencioso, tan sólo deciros que... a mi, me ha dado luz, me ha conducido a amar más el silencio, si cabe, y el encuentro con uno mismo, ha vuelto a convertir a la meditación en mi asidua amante, para reconocerme, perderme y nadar en la vacuidad de la nada y del todo.
Me he sentido reconfortada buceando en mi interior, para dejar fluir, con constancia, toda la belleza que hay dentro y que tanto nos cuesta reconocer como propia, tomando consciencia de que hay que prescindir del tener para llegar al ser.



Si al admirar, una fotografía, lo haces, acompañado de una buena música, son tales las emociones que se producen que saciarse de creatividad, y belleza es inevitable.
Las fotografías son muy particulares, y su aportación a nuestro enriquecimiento depende mucho del momento anímico en el que nos encuentremos, tanto para realizarlas, como para contemplarlas; pueden colmarte de alegría, de tristeza, de ternura, incluso, muchas veces, de nostalgia... 
Cuando las tomamos nosotros, nuestro punto de mira se dirije hacia aquello que refleja con mayor exactitud como nos sentimos;
Es curioso, me ha pasado más de una vez... sólamente hay un ave en todo el cielo pero mi mirada va directamente a ella, como si con ello quisiera reafirmar el deseo de volar alto y libre.

Envidio el ojo mágico de muchos que retratan emociones.

Otro de mis grandes gozos es darme un atracón de saxofón, me transporta, me llena, me relaja, ya se que muchos me direis que a vosotros no, pero yo soy capaz de concentrarme y dar el máximo en aquello que esté realizando, como si la música me empujara a sacar lo mejor de mí.


Podría seguir desgranando, tantas cosas... todo aquello que conlleva la magia de crear es grandioso, desde lo más simple a lo más rocambolesco.
 Lo que cada uno percibimos y recibimos de las obras de los demás es muy subjetivo, pero lo que si es cierto, a mi modo de ver, es que con independencia de lo que nos transmitan, la esencia de sus autores está plasmada en las obras, y ya, solamente, por eso, son dignas de admiración.

martes, 17 de febrero de 2015

¿¿¿Como somos???


Cuanto más se acerque, el como queremos ser, a lo que proyectamos ser, más nos aproximamos a lo que somos. 

Esta mañana, como quien no quiere la cosa, mientras me tomaba mi primer café, me he hecho una pregunta, una pregunta, a priori, bastante simple...

Yolanda, ¿como eres?...

Bufff me he quedado en blanco..., mi primera respuesta ha sido, soy... soy cambiante, y entonces he intentado reconocerme, describirme, más allá de lo obvio o de lo q me han contado sobre mi, para llegar al final a un vacío... Y yo que sé...

Me he dado cuenta de que así como las empresas, las personas también  tenemos identidad e imagen, que no es ni con mucho lo mismo, aunque generalmente se confundan...

Nuestra identidad, es aquello que deseamos ser, lo que nos planteamos, soñamos y nos esforzamos, en mayor o menor medida, por ser...
Nosotros elegimos una serie de valores, de conceptos, de ideas, que nos gustaría que impregnaran nuestra manera de proceder y que conformaran nuestro  paso por la vida, pero no siempre es fácil llevarlos a efecto, aunque creamos que si, hay muchas veces que somos desleales a nuestro planteamiento.
Eso nos lleva a agobiarnos, a sentirnos mal con nosotros mismos, a buscar justificaciones a nuestro proceder, cuando, lo cierto es que no pasa nada...

No pasa nada porque eso nos ayuda, o a ratificarnos en lo que queremos, o a cambiar el rumbo y rectificar, que como dice el saber popular, es de sabios.
Tal vez, algunos de nuestros planteamientos iniciales , eran acertados para un momento de nuestras vidas, pero no para el recorrido completo, para eso está el camino, para aprender y cambiar.

Otra cosa bien distinta es como lo proyectamos...

Proyectamos con nuestras carencias, nuestras inseguridades, nuestras dudas y lo que creemos nuestras certezas, proyectamos, redibujando a nuestra manera, lo que queremos que sea nuestra identidad, adaptándola, en ocasiones, para que perturbe lo menos posible nuestro "pequeño mundo", pero lo cierto es que solo saliendo de nuestra zona de confort conseguiremos avanzar y dar pasos para acercarnos a lo que queremos ser, y lo que, realmente somos, eso que está ahí, aunque no seamos conscientes. 

Muy distinta es nuestra imagen, esa ya no está en nuestras manos, hay tantas imágenes de nosotros como personas nos contemplan, cada uno influido por la parte de nosotros que les ha llegado, que les ha tocado disfrutar o que les ha venido a bien tomar.
Y todo en función de su estado de animo o sus condiciones externas e internas  y variable en tiempo y momento.
Lo que proyectamos puede ser interpretado de múltiples formas por los receptores.

Pero no es nuestro problema, poco podemos influir, por no decir prácticamente nada, en lo que los demás piensen de nosotros... su visión es subjetiva, propia de cada uno.

Nuestra misión es proyectarnos con transparencia y desde el corazón , el que nos vea como nos gustaría, bienvenido, y el que no... pues, bien recibido, al final lo que él ve, también es una parte de nosotros.

Después de años de mucho leer, reflexionar, y meditar, para llegar a mi misma, aun a sabiendas que cada día, cada hora, cada momento, e incluso, cada segundo, que pasa, ya no soy igual, porque, siempre, hay algo, aunque sea minúsculo, que se ha alterado en mi... 
Y convencida de que somos un todo completo cada uno, modelado por el entorno y nuestra percepción de la realidad....
Me he sorprendido, a mi misma,  preguntándome como soy...

Tengo que reconocer que lo único que contemplo, medianamente claro, hoy por hoy, es que soy esencia con cobertura humana, pero, la composición de esa cobertura... sigo sin tenerla del todo descubierta... 

Quizá tu tienes más suerte identificando tus ingredientes... Si es así, si te sientes capaz de decir como eres, sinceramente, te felicito.

sábado, 14 de febrero de 2015

Enamorada del AMOR ( con mayúsculas)

Somos AMOR sólo que muchas veces nos gusta disfrazarlo...

Día de San Valentín, día del amor por excelencia... Y hoy, precisamente hoy, como la canción...

Hoy quiero confesar...que estoy enamorada...

Seguro que hay muchos sorprendidos ante esta afirmación, pero, a poco que me conozcan, no deberían de estarlo tanto.., soy una eterna enamorada!!!
Lo único que no me gusta de este día es ese revestimiento comercial que lo adorna, pero también es verdad que el marketing está inventado para incentivar la compra y que seria de los comercios sin esos días especiales...
Si bien es cierto que cualquier día es bueno y casi mejor que este, en el que casi se ve uno en la obligación, para expresar lo que se siente...
Una pregunta que siempre me he formulado, ¿Por qué, cuando hablamos de estar enamorado tendemos a centrarnos en el amor de pareja?...¿es que está, solamente, reservado al tu a tu?...

¿Que es estar enamorado? Para mi es sentirme en comunión con alguien o algo; o sea, es respetarlo, amarlo con pasión, desear su bienestar, lamentar sus daños, compartir las "pequeñeces", disfrutar de su brillo, de su vivir, ser un todo sin perder la identidad individual... 

Es por eso que puedo afirmar que:

Yo me siento en AMOR...
Con lo que me rodea, con las flores de mi jardín que me sorprenden apareciendo cuando desean, libres, regalándome su belleza desde  q retoñan.
Con los pajarillos que se posan en los árboles para saludarme el nuevo día, 
Con el hermoso cielo que me ampara, unas veces mas azul, otras mas blanco, gris, o muy oscuro, como la vida misma, pero siempre, siempre,  luz, aunque la oculte detrás de sus nubes.
Con la tierra que piso, que se estremece y gime ante las agresiones pero que no deja de sentirse en comunión con aquellos que la dañan. 
Con el viento, que me acaricia, el fuego que me calienta, el agua que me purifica...

Me declaro enamorada...
De la amistad, verdadera, esa que admira, respeta, vibrando a cada paso que doy, aunque lo considere erróneo, que expresa en libertad, sin miedo, o, aun  a riesgo de ser excluida.
Del pensamiento, la cultura, las letras, pero de las que aportan, instruyen y abren vías de diálogo y crecimiento.
De la meditación que me da la oportunidad de vagar en la nada, en la vacuidad del todo, reencontrándome... 
De mis contradicciones, mis "locuras", en ocasiones tan cuerdas, de mis dudas, de mis pensamientos cambiantes, de mi apertura a la sorpresa, de mis torpezas cuando, siendo consciente, me ayudan a enmendar, de mi alegría, en ocasiones inducida por mi tremendo respeto y agradecimiento a la vida. 

Estoy en Amor con...
Mi familia, aunque tengamos disparidad de criterios, ¿quien no?, aunque nos sintamos a veces, unos con otros,  alejados, incomprendidos o mal interpretados,  forman parte de mi y los quiero.
Mis hijos, que van más allá, son una prolongación de mi misma, fruto de, mi amor, mis sonrisas, mis angustias , mis ilusiones, mis carencias, todo ello, lo positivo, mejorado con creces...
Mis amigos, mis conocidos, que me aportan, me acompañan, de los que aprendo y con los que comparto, en mayor o menor grado, vivencias.
Mis compañeras de piso, que me aguardan impacientes, me acompañan en las noches de soledad, me escuchan atentas y me dan todo lo mejor que pueden ofrecer a un ser humano, cariño, ladridos y muchos besos perrunos.

Vivo enamorada de...
Esos ojos que me miran, con una ternura infinita, en cualquier parte del mundo.
Las sonrisas que se esbozan aun en la mayor de las miserias.
Todos los que aceptan y agradecen lo que les toca en el camino.
Aquellos luchadores que mantienen la esperanza y la ilusión, por un devenir más humano y mas justo. 
Todas las personas que comparten, se implican, se entregan, que están tristes pero siguen adelante buscando un motivo para sonreír.
Los que piensan, como yo, que la vida, por muchos sinsabores que tenga merece la pena ser vivida.

Me declaro, profunda y rotundamente, enamorada...Del AMOR; 
y... ¿quien sabe? Quizá también de alguien, alguien por quien me gustaría, ser abrazada muy fuerte y mirada directamente a los ojos, y agarrada de la mano para contemplar las estrellas, pero, que exista o no..., eso ya es otra historia... 

El amor es un sentimiento unilateral...uno ama porque ama...el resto son "anécdotas" del devenir cotidiano...


martes, 10 de febrero de 2015

"Ídolos anónimos"...

Tendríamos que aprender admirar a los que tenemos mas cerca, a las personas que hacen de nuestro día a día un vivir mas amable, a aquellos que nos dan todo lo que son, lo que pueden y lo que saben...

Viendo la Gala de los Goya, no he podido dejar de tener una sensación de tristeza,  al ver  como se rendía pleitesía a unos, como se menospreciaba a otros, como se idolatraba, y como se jugaba con las emociones del de aquí y del de allá. 
No voy a citar chistes, ni alusiones, ni momentos, que todos hemos oído o vivido, y hemos cuestionado unos y alabado otros.
Independientemente de si tuvieron su gracia o no, o de lo apropiado o no, a mi me dejaron un regusto un tanto amargo...

Hay personas realmente admirables, gente que ha logrado sus objetivos, que ha alcanzado sus metas, no sabemos a qué precio, unos con mucho esfuerzo y tesón y otros, quizá, con habilidad y un golpe de suerte... pero las han alcanzado...
Todos ellos son idolatrados por muchos, gente, en la que, sobre todo los jóvenes fijan su mirada, depositan sus sueños de futuro y se esfuerzan en emular en todo, incluso en los peinados, estilos, y formas de comunicarse...

Lo penoso es que algunos de nuestros ídolos lo son, por jugar bien al fútbol y alcanzar la fama, por estar en la meca del cine, independientemente de si sus películas son buenas o malas, por ganar dinero, por construir imperios, por ocupar portadas de revistas, por tener aventuras amorosas imposibles, por llenar estadios, por tener grandes casas, coches, .... generándonos una envidia, no siempre sana, por lo que poseen, no por lo que son.
De la mayoría de ellos desconocemos como se comportan como personas, simplemente nos detenemos en el personaje, y eso, es lo que "adoramos"..,

Y...tristemente se nos olvidan los auténticos héroes de nuestro devenir cotidiano, esas personas casi invisibles que nos rodean;

Desde, por ejemplo, el panadero que se preocupa de que el pan este horneado y listo para llegar a nuestros hogares cada mañana, el portero de nuestra casa, oficina, o recepción,  que nos saluda amablemente  como animándonos a comenzar bien el día, esa madre que sale acelerada de su casa para llevar a su hijo al colegio o a la parada del autobús, cargada de papeles y de nervios, para llegar a tiempo a su trabajo, esos maestros que enseñan con paciencia y cariño las primeras palabras y números  a las generaciones de futuro, o el vecino que nos regala su bostezo mañanero. 

Esos médicos en los ambulatorios, que se preocupan por atender a sus pacientes, aun a riesgo de ser criticados por emplear mas de los 15 minutos reglamentarios en cada uno, aquellos que cuidan con esmero de nuestra seguridad, de nuestros derechos, de nuestros ancianos, de nuestros enfermos, los que a sabiendas, de que va a ser un día difícil, visten su mejor sonrisa para encararlo. 

Los que cada día dan lo mejor de sí mismos en aquello que realizan, los que tropiezan y se levantan, los que aceptan pero no se resignan, los que luchan y siguen soñando, los que siempre tienen su mano tendida, los que escuchan.

Los que sin ninguna pretensión viven la vida, y se alegran por lo que le sucede al otro, y no maldicen su suerte, y tantos que no sólo dan, sino que se dan a los demás a diario, con naturalidad, sin ostentaciones, ni necesidad de reconocimiento.

Todos ellos son grandes seres humanos a los que nuestra sociedad tendría que admirar y colocar en un gran pedestal. 

Héroes anónimos que pasan desapercibidos pero que debieran ser el espejo en el que mirarse cada mañana. 

jueves, 5 de febrero de 2015

"Con más de medio siglo..."

Mi vida es un cuadro al que ir añadiendo pinceladas, unas de colores cálido y otras muy fríos, brochazos que van cambiando y llenando de magia el lienzo de mi existencia...

Hoy, cuando cumplo 55 años me ha dado por mirar mi vida con retrospectiva...más de medio siglo...más de la mitad de mi camino...
Que afortunada soy!!! Que agradecida estoy!!!

La vida me ha regalado de todo, momentos brillantes y momentos oscuros... retazos de tiempo llenos de emociones, de sentimientos...
Momentos en los que he vibrado hasta ensordecer, momentos de una tremenda soledad, en la que he navegado para reconstruirme.

Personas a las que he amado y amo, otras a las que quiero, muchas a las que estimo, y algunas, a las que sin lamentar haber conocido, me producen una sensación triste...
Personas, todas, que han aportado a mi vida, y me han empujado a crecer.

Gente, con la que he soñado, reído, llorado, aprendido, que me han regalado sus vivencias, sus alegrías, sus tristezas, sus preocupaciones, su sinceridad, sus miedos.

Gente con la que he compartido, me he ilusionado y desilusionado, siendo consciente de que cada persona que llega a mi vida lo hace y lo ha hecho, por un motivo, seguramente porque algo tenía y tengo que aprender y quizás enseñar. 

Personas que me han ayudado a ser más humilde, que me han recordado que todos somos uno y grandes, que con sus silencios o sus palabras han colaborado a mi evolución y a que esta historia de vivir, sea, sino un camino fácil, si hermoso para recorrer, con sus recovecos y explanadas, sus luces y sus sombras.

Se me pone el vello de punta cada vez que miro a mis hijos, haber colaborado a su desarrollo es algo indescriptible, es tanta la satisfacción, el amor y la paz que siento, que casi me hace sonrojarme, por considerarme participe de tan grandes seres humanos.
Por eso devolverlos a la vida, para que vivan la suya, es un tremendo orgullo.

No me puedo quejar, he tenido y tengo mucho de algunas cosas y no tanto de otras, al fin y al cabo lo suficiente, pero hay algo que poseo a raudales y es  mucho amor;
Hay quien dice que no ha amado nunca...lo lamento, lamento que no sean capaces de ver que el simple hecho de disfrutar con, una mirada, una puesta de sol, el color  de una rosa, el balanceo del viento a las hojas de los árboles, el canto de un pájaro, el calor de una mano, la sonrisa de un niño, el brillo de la luna, los copos de nieve caer, el abrazo de un ser querido, una carcajada o una respiración profunda, eso es AMOR. 
Yo ciertamente, me considero afortunada, me siento parte de todo ello.

Cuantas cosas llenan la vida , cuantas aventuras y desventuras, cuantas historias, cuantas etapas, cuanta magia!!!

Me queda... ¿quien sabe?... Quizás otro medio siglo que recorrer, optimista que es una y una gran amante de la vida,  lo que es seguro es que será un camino sorprendente, años de añadir pinceladas a mi cuadro o capítulos a mi libro...

Espero y deseo seguir llorando y riendo y amando y no odiando y sobre todo espero seguir viviendo!!!

Gracias por, ser, ayer, hoy y mañana, parte de mi camino. Seguimos compartiendo!